El
amor no es esencialmente una relación con una persona específica: es una actitud,
una orientación del carácter que determina el tipo de relación de una
persona con el mundo como totalidad, no con un "objeto" amoroso. Si
una persona ama sólo a otra y es indiferente al resto de sus semejantes, su
amor no es amor, sino una relación simbiótica, o un egotismo ampliado. Sin
embargo, la mayoría de la gente supone que el amor está constituido por el
objeto, no por la facultad. En realidad, llegan a creer que el hecho de que no
amen sino a una determinada persona prueba la intensidad de su amor. Tratase
aquí de la misma falacia que mencionamos antes. Como no comprenden que el
amor es una actividad, un poder del alma, creen que lo único necesario es
encontrar un objeto adecuado -y que después todo viene solo-. Puede compararse
esa actitud con la de un hombre que quiere pintar, pero que en lugar de
aprender el arte sostiene que debe esperar el objeto adecuado, y que pintará
maravillosamente bien cuando lo encuentre. Si amo realmente a una persona, amo
a todas las personas, amo al mundo, amo la vida. Si puedo decirle a alguien
"Te amo", debo poder decir "Amo a todos en ti, a través de ti
amo al mundo, en ti me amo también a mí mismo".
Erich Fromm
Los objetos
amorosos
Gustav Klimt- El beso
2 comentarios:
Al objeto de lo que habla esta entrada, cuánto daño han hecho las canciones... y las películas... y los libros... ;-)
El amor ES.
Aprender, equivocarse, experimentar, forma parte de la vida... una oportunidad única de ser.
Publicar un comentario